DECIDISTE POR LOS DOS

Óleo sobre lienzo, de Thomas Saliot.

Mi corazón no encuentra sosiego.
Se deshace febrero y te quiero... te quiero.
En pleno verano me congelo.
Hilvano como puedo, y no puedo. Es eso.
No aprendí a coser y me arrepiento.
¿Cómo se remienda un sentimiento, mi enero?

Y lo intento, de veras lo intento.
Noche y día desde el pie hasta el alma yo tiemblo.
No resisten mis huesos el peso.
Agoté mi energía en un sueño. Ya muero.
Por los dos decidiste y yo pierdo.
¿Qué es esto? Un pueblo en ruinas parezco, desierto.

Quemaste los puentes y prefiero
pensar que al irse el humo te veré de nuevo.
Se diluye en tu fuga lo nuestro.
¿Cómo es que te vas sin decir «Ya no vuelvo»?
¿No pensaste un segundo en mi infierno?
Ni el derecho me has dado a un último beso.

Quisiera entenderte y ser más fuerte,
huir de tu egoísmo y que ceda esta fiebre.
Por los dos decidiste y me duele.
No tuviste presente: enfundabas mi suerte.
Me obligaste a elegir sin opciones.
Despedida no hubo, ni misa, ni flores.

Letra: Lara Hum.
© DNDA 2016
Del libro Mi columpio en la luna.